Primero, pidieron una distinción entre amigdalitis viral y bacteriana.
A pesar de sus similitudes en el inicio de los síntomas, sugieren que "ambos tienen diferentes consecuencias para el tratamiento y la detección tardía. Las infecciones bacterianas pueden incluso provocar enfermedades cardíacas o renales".
"Todo lo que tiene el sufijo 'itis' es un signo de inflamación", dijo. En el caso de la amigdalitis bacteriana, Quéliz dice que hay bacterias "colonizando nuestros dos bulbos detrás de la orofaringe, a ambos lados de la úvula".
“Si se observa una mancha blanca purulenta (pus), aumenta el tamaño de las amígdalas, lo correcto es hacer una prueba o cultivo en la garganta para ver qué tipo de bacteria estamos tratando”, dijo Quéliz. También explicó que cuando el cuadro es más deteriorado e indeciso, para determinar la condición, al paciente se le realiza un hemograma y se observa el crecimiento de glóbulos blancos.
Quéliz agregó que una garganta roja "no necesariamente indica que sea bacteriano, por lo que es necesaria una evaluación".
Daño en el riñón
En tanto, para el pediatra Daniel Paiewonsky, uno de los síntomas más importantes es la "escarlatina", con piel de lija y lengua en forma de fresa, que puede presentarse entre los 5 y los 15 años.
“La escarlatina puede causar daño renal durante dos o tres semanas, provocando una lesión renal aguda; otra complicación es la fiebre reumatoide. Cuando se producen inmunocomplejos, algunos de sus complejos atacan ciertas partes del cuerpo, como las articulaciones y las válvulas del corazón”. Él dice.
Entonces, agrega Paiewonsky, cuando un paciente tiene una válvula mitral que no se trata, "la válvula mitral puede aliviarse, creando un soplo, que es la regurgitación de la sangre que regresa a través de ese tubo, a lo que se agrega 'corea de Sydenham', lo que lleva a movimientos involuntarios y nódulos".
Un dato interesante que aportó el experto de la salud, es que cuando se presenta la fiebre escarlatina es medicada con penicilina aunque el patógeno ya no esté al 100 por ciento presente en el cuerpo, esta también puede conllevar antibióticos profilácticos, ya que cuando la válvula mitral se ve afectada el tratamiento determinante es la cirugía, porque la afección de esta desencadena la entrada de otras bacterias.
Daño al corazón
Rufino Senén Caba, médico, cardiólogo y presidente del Colegio Dominicano de Medicina (CMD), habla sobre los daños que la amigdalitis bacteriana puede causar en el corazón de los afectados.
"No solo se detiene en las amígdalas; hay muchas cosas que se transportan al torrente sanguíneo, que lamentablemente van al corazón y atrofian las válvulas y los músculos, pueden causar daños como miocarditis, y cuando afecta, el mayor peligro es", dijo Kabbah.
Senén Caba aclaró que aunque mucho ha cambiado con el tiempo, “esto sigue siendo frecuente en los hogares marginados del país”.
Dijo: “A pesar de las mejoras en la atención y prevención infantil, todavía se observan niños afectados por amigdalitis en entornos muy desfavorecidos que no los llevan a tiempo a las consultas pediátricas y terminan con secuelas en sus mentes muy pequeñas”.
Síntomas
La doctora Mabel Quéliz comentó sobre el padecimiento general de la enfermedad, señalando que esta infección bacteriana es precedida por un dolor de garganta que puede estar acompañado de fiebre, dificultad para comer y pérdida del apetito ya que interfiere con la alimentación.
Explicó que, en general, esto no tiene relación con síntomas gripales como secreción nasal, gripe, congestión nasal, etc., porque estos son síntomas del virus.
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